¿Cómo está la situación de Adam Bareiro?

Si bien el mercado de pases de San Lorenzo marcha cuesta arriba por la falta de refuerzos, Ruben Darío Insua recibió una buena noticia pensando en el armado del plantel para los importantes objetivos que el Ciclón tendrá por delante en 2023: se aseguró la continuidad de Adam Bareiro, el goleador del ciclo, por dos años más. Además, sumará en los próximos días a Álex Ibacache para engrosar la defensa y las conversaciones con más posibles incorporaciones están en marcha para poder darle al entrenador lo que pide para tener un equipo aún más competitivo.

El delantero paraguayo publicó dos cartas en los últimos días: una de despedida para con el Monterrey de México, club que lo compró hace largos años, y una para los hinchas cuervos, deseándoles un feliz año nuevo y mostrándose entusiasmado con la posibilidad que se le presenta de seguir defendiendo la azulgrana, camiseta que él siempre dijo que quiere mucho. A pesar de todo esto, que mostraría que el punta ya está con todo listo en Boedo, surgió un interrogante importante: ¿Cuándo firma? 

La respuesta que dieron desde el club a San Lorenzo Primero en las últimas horas fue contundente y didáctica: no tiene que firmar nada. Al haber sido un préstamo con opción de compra, el club le firmó un contrato hasta 2025 y, al ejecutar la cláusula, simplemente se seguirá con el vínculo que ya se había rubricado a principios de 2022, cuando arribó cedido desde el club mexicano. Por ende, tiene convenio vigente y está habilitado para jugar.

Esta nueva etapa será la continuidad del segundo ciclo de Bareiro en el club. En el primero, entre 2019 y 2020, había arrancado bien y había perdido confianza tras un penal errado ante Rosario Central. Anotó en el último partido azulgrana antes de la pandemia y, por los efectos de la llegada del COVID-19, se despidió del club con menos partidos de lo esperado. En su segundo paso, si bien le costó arrancar de la mano de Pedro Troglio, se le abrió el arco y tanto con Fernando Berón como con Ruben Darío Insua se convirtió en una pieza clave.