Tres puntos que valen oro

Luego del receso por las elecciones nacionales, la pelota volvió a rodar en el Nuevo Gasómetro: San Lorenzo recibía a Deportivo Riestra, el humilde pero batallador equipo que se transformó en uno de los animadores del Grupo B. En un encuentro cargado de matices, tensiones y necesidad de puntos, el Ciclón debía hacerse fuerte de local para no perderle pisada al lote de los clasificados.

Desde el inicio, San Lorenzo —bajo el sello de Damián Ayude— asumió el control del juego con criterio y paciencia. Riestra, fiel a su estilo, esperó replegado, cortó el ritmo con infracciones y apostó al error rival, con un arbitraje permisivo que lo favoreció. La primera chance clara fue azulgrana: Cuello anticipó en el área, generó peligro tras un rebote, pero su cabezazo se fue apenas alto. Con el correr de los minutos, Riestra emparejó y hasta se animó: Gill tapó abajo un tiro libre envenenado y luego una volea peligrosa de Herrera. El Ciclón no encontraba claridad, y el entretiempo llegó con sensaciones divididas.

El segundo tiempo fue puro vértigo. Gulli desbordó con potencia y Arce salvó a la vista. En la réplica, Riestra tuvo el gol pero Gastón Hernández salvó milagrosamente sobre la línea. De esa jugada nació el quiebre del partido: Báez aceleró por izquierda, tiró el centro, Ladstatter la acomodó de cabeza, y Cuello inventó una media vuelta inolvidable que explotó las gargantas cuervas. Golazo y 1-0. A partir de ahí, Riestra buscó con centros y San Lorenzo se defendió con orden. Romaña se cansó de despejar, Gill transmitió seguridad, y aunque los de Bajo Flores tuvieron la pelota, no generaron verdadero peligro. El Ciclón resistió y cerró el partido con madurez.

⚽️🗣️ ¡GOOOOOOOOLAZO DEL CICLÓN!

Con este tanto de Cuello, #SanLorenzo le gana 1-0 a #Riestra

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— San Lorenzo Primero (@SanLorePrimero) October 31, 2025

Fue un triunfo trabajado, inteligente, con puntos altos en todas las líneas: Gill sostuvo, Romaña fue una muralla, Cuello anotó un gol memorable y Gulli fue clave en el desequilibrio. San Lorenzo volvió a ganar, sumó tres puntos fundamentales, y lo más importante: sigue creyendo que el objetivo está más cerca que nunca.