Murió con las botas puestas

Murió con las botas puestas, como lo hacen los grandes. El Ciclón no pudo mantener el 1-0 en el Bidegain y cerró su participación en la Sudamericana tras caer 2-0 ante el San Pablo, otro de los grandes del continente. Duele, es verdad, pero la realidad llamó a la puerta de las aspiraciones de un conjunto azulgrana que dejó todo pese a quedarse con las manos vacías.

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— San Lorenzo Primero (@SanLorePrimero) August 11, 2023

No la tuvo fácil en Brasil, en absoluto. San Pablo salió decidido a recuperar terreno perdido en la serie y desde el inició asfixió al Ciclón sobre su propio campo. Sin embargo, en la primera contra que tuvo San Lorenzo casi se pone en ventaja cuando Giay pateó y su remate fue desviado al corner. Inmediatamente una desinteligencia del fondo paulista le quedó al Perrito Barrios quien se hamacó y cuando encontró el hueco clavó un remate en el poste. Pero de repente, el Tricolor reaccionó y luego de un achique de Batalla, Gastón Hernández rechazó sobre la línea lo que era el gol local. Al toque, el capitán azulgrana ratificó su gran presente al meter mano cambiada para sacar un remate peligroso de Alisson sobre el ángulo superior izquierdo.

El partido era de ida y vuelta, con predominio territorial del elenco brasilero pero con emociones para ambos lados. Cada avance de San Pablo generaba riesgo y todas las fichas estaban puestas a algún avance aislado con el que podría definirse la serie para la insuaneta. Sin embargo, llegó una supuesta falta de Campi que solo el juez Ostojich vio: tiro libre, salto y anticipo de Calleri para decretar el 1 a 0 parcial para San Pablo. Serie igualada, barajar y dar de nuevo para el Ciclón…

En la segunda parte, ambos conjuntos se mostraron más contenidos y el encuentro decayó en cuanto a las situaciones, no obstante San Pablo dominaba las acciones y daba la sensación de que aumentaría la ventaja en cualquier momento. El ingreso de Maroni presagiaba una mayor conexión colectiva en el Ciclón, pero nada de eso pudo consolidarse, al contraio: pasados los 20 minutos del complemente, Wellington Rato metió el enésimo enganche, sacó a pasear al fondo azulgrana, y metió una exquisita asistencia que pasó por toda el área y Luciano empujó ante un indefenso Batalla. 2-0 para los paulistas, si pensábamos que la mano pintaba compleja, ni hablar a esta instancia del juego. Con la necesidad de descontar para llegar a la definición por penales, Rubén Darío Insúa metió en cancha a Nico Blandi. Pero tampoco cambió la ecuación ya que prácticamente no recibió contacto con el balón. Al tiempo que el reloj era el peor enemigo y la reacción se hacía esperar -en el mejor de los casos- San Lorenzo comenzaba a resignarse sin dar siquiera batalla ante un rival muy superior y que estaba más cerca del tercer gol que el Ciclón del tan anhelado descuento.

No hubo milagro y San Lorenzo se despidió de la Sudamericana sin atenuantes. En el global, el poderoso San Pablo fue un poco más que el Ciclón y selló la clasificación a los cuartos de final. En lo que resta del año, el equipo que dirige Insúa pondrá su energía en la Copa Argentina y en la Copa de la Liga, competencias donde no tengo dudas de que volverá a dejar todo como lo hizo en el Morumbí. Porque perder pierden casi todos, pero hacerlo con las botas puestas, solamente unos pocos…